1. Caín
Caín es uno de los pueblos referente
del Valle de Valdeón y del propio
Parque Nacional de los Picos de Europa. Situado a tan sólo 480 metros de altitud el pueblo de Caín es lugar de
partida de numerosas rutas de senderismo, entre las que destaca la
conocida Ruta del Cares. Su nombre
significa dependiendo de su origen: brotar, surgir, pastizal de cabras,
niebla o fuente. Rodeado de altas cumbres calizas, los antiguos cainejos
(gentilicio de los oriundos de Caín)
tenían fama de ser a la par grandes pastores y grandes escaladores. De
este pueblo era precisamente el conocido como “El Cainejo”, Gregorio Pérez Demaría, que ha
pasado a la historia por la hazaña de conquistar el
Naranjo de Bulnes en 1.904 como
compañero de cordada de D. Pedro
Pidal,
Marqués de Villaviciosa. El pueblo
guarda la tipología de sus construcciones, piedra, madera, teja… Aunque
aún existe y se puede visitar, pero ya sin moradores está el pueblo de
Caín de Arriba, escondido entre montañas. En el pueblo el visitante
encontrará la pequeña iglesia de
Santo Tomás y uno de los molinos
mejor conservados y protagonista de muchas fotografías por su enclave muy
próximo al comienzo de la Ruta del
Cares.