República Dominicana es uno de los trece países que forman
la América Insular, Antillas o Islas del mar Caribe, uno
de los treinta y cinco del continente americano.
Su capital y ciudad más poblada es Santo Domingo. Está
ubicado en la zona central de las Antillas, en los dos tercios orientales de
la isla La Española, limitando al norte con el océano Atlántico, al este con
el Canal de la Mona, que lo separa de Puerto Rico, al sur con el mar Caribe,
y al oeste con Haití, que es el otro país situado en La Española. Con 48.670
km² es el segundo país más extenso por detrás de Cuba y con casi
10.500.000 habs. en 2.010, el segundo más poblado, nuevamente por detrás de
Cuba. Habitado por taínos desde el siglo VII, el territorio del país fue
descubierto por Cristóbal Colón en 1.492, convirtiéndose en el lugar del
primer asentamiento europeo en América, nombrado como Santo Domingo, actual
capital del país y primera capital de España en el Nuevo Mundo. Después de
tres siglos de dominación Española, el país alcanzó la primera independencia
en 1.821, pero fue tomado rápidamente por Haití en 1.822.
Indice |
La República Dominicana es el destino más visitado del Caribe.
Durante todo el año los campos de golf del país se encuentran entre
las principales atracciones de la isla. En el país se encuentra la
montaña más alta del Caribe, el Pico Duarte, así como el Lago
Enriquillo, el punto más bajo en cuanto al nivel del mar se refiere,
y el lago más grande del Caribe. Quisqueya, como también se le
llama al país, tiene una temperatura promedio de 26 °C y una
gran diversidad biológica.
La música y el deporte son de gran importancia en la cultura
dominicana, con el merengue y la bachata como ritmos nacionales, y
el béisbol como el deporte favorito. El país tuvo la presidencia pro
tempore de la CELAC para el período 2.016-2.017.
2. Etimología
La palabra Dominicana proviene del latín Dominicus, que significa Domingo. Sin embargo, la isla toma el nombre por
Santo Domingo de Guzmán, fundador de la orden dominicana. Los Dominicos establecieron una casa de altos estudios en la isla de
Santo Domingo que hoy en día se conoce como la Universidad Autónoma de
Santo Domingo, se dedicaron a la protección de los taínos nativos de
la isla que estaban sometidos a la esclavitud y a la educación de los
habitantes de la isla.
Otros historiadores como Juan Daniel Balcácer y Emilio Rodríguez
Demorizi, sostienen que el nombre dominicano proviene del Domingo
(Consagrado al Señor), coinciden que este surge con el nombre
de Santo Domingo, nombre con el cual Bartolomé Colón fundó la ciudad
primada de América en el oriente del río Ozama a finales del siglo
XV. Los Historiadores aseguran que existieron tres razones por las que
Colón eligió ese nombre. La primera razón fue que el día que llegó a
la ciudad se celebraba una fiesta en honor a Santo Domingo de
Guzmán, fundador de la orden de predicadores Dominicos; la segunda,
que ese día era Domingo y la tercera que el padre de los hermanos de
Colón se llamaba Domingo.
3. Hotel Occidental Punta Cana
4. Bávaro
Bávaro
es un paraje del distrito municipal Verón Punta Cana, dependiente del
municipio Higüey en la provincia La Altagracia, República Dominicana.
Originalmente fue concebido como un pueblo dormitorio para los
trabajadores del complejo turístico de Punta Cana, pero se ha
transformado en un centro de servicios turísticos debido a la expansión
hotelera hacia el norte de Punta Cana, en torno a la playa Bávaro;
convirtiéndose así en una importante zona turística del
país. En toda la zona existen decenas de hoteles, entre los que destacan los
de inversión española, como Riu, Iberostar, Be Live Grand Punta Cana,
Meliá, Barceló, Palladium, Catalonia o Bahía Príncipe. La zona también
cuenta con varias discotecas como: Oro at Hard Rock Hotel, Imagine,
Mangú o Pachá, que animan las noches de fiesta de los
turistas. Se han instalado numerosas atracciones turísticas, algunas de cierta
envergadura como el Manatí Park en Bávaro, un parque acuático con
manatíes, delfines y otras clases de animales. Para los turistas, es más
popular la zona de playas Punta Cana por ser más asequibles a los
precios internacionales. Sin embargo, Bávaro mantiene el exclusivismo y
la elegancia que le dan el título de mejor playa caribeña. Según
las estadísticas del Ministerio de Turismo, en la República
Dominicana hubo una inversión en el área turística superior a 1.500
millones de dólares, equivalente a unos 50.985 millones de pesos
dominicanos, representando un notable crecimiento en esta rama y
consolidándose el turismo en la República Dominicana como uno de los
mejores del mundo. Solamente desde el aeropuerto internacional de
Punta Cana (PUJ), entran al año más de 2.000.000 de turistas y
más de 5 millones de pasajeros en general.
5. Historia "Era precolombina"
Las sucesivas olas de inmigrantes Arahuacos, moviéndose hacia el norte
desde el delta del Orinoco en América del Sur, se establecieron en las
islas del Caribe. Alrededor del año 600, los indios taínos, una cultura
arahuaca, llegaron a la isla, desplazando a los habitantes anteriores. Los
últimos migrantes arahuacos, los caribes, comenzaron a moverse hasta las
Antillas Menores en el siglo XII, e invadían aldeas taínas en la costa
oriental de la isla al mismo tiempo que arribaban los españoles en
1.492. Los taínos llamaban a la isla Quisqueya "madre de todas las
tierras y "Haiti", tierra de altas montañas". En el momento
de la llegada de Colón en 1.492, el territorio de la isla consistía en
cinco cacicazgos: Marién, Maguá, Maguana, Jaragua e Higüey. Estos eran
gobernados respectivamente por los caciques Guacanagarix, Guarionex,
Caonabo, Bohechío y Cayacoa.
6. Época Colonial " 1492 - 1821 ".
Llegada de los Europeos y Colonización
Cristóbal Colón llegó a la isla en su primer viaje el 5 de diciembre de
1.492, dándole el nombre de La
Española. Creyendo que los europeos eran de alguna forma sobrenatural,
los taínos les dieron la bienvenida con todos los honores. Era una
sociedad totalmente distinta de la que venían los europeos.
Guacanagarix, el jefe anfitrión que dio la bienvenida a Cristóbal Colón
y sus hombres, los trató con amabilidad y les dio todo lo que deseaban.
Sin embargo, el sistema igualitario de los taínos se enfrentó a las
estructuras del sistema feudal de los europeos. Esto llevó a los
europeos a creer que los taínos eran débiles, y comenzaron a tratar a
las tribus con más violencia. Colón intentó mitigar esto cuando él y sus
hombres se marcharon de Quisqueya, dejando a los taínos con una buena
primera impresión.
Colón había consolidado una firme alianza con Guacanagarix, quien era
un poderoso jefe de la isla. Después del naufragio de la Santa María,
Colón decidió establecer una pequeña fortaleza con una guarnición de
hombres que podrían ayudarle a reivindicar esta posesión. El fuerte se
llamó La Navidad, porque los acontecimientos del naufragio y la
fundación del fuerte ocurrieron el día de Navidad. La guarnición, a
pesar de toda la riqueza y belleza de la isla, fue sacudida por las
divisiones que terminaron en un conflicto entre estos primeros europeos.
Los más rapaces comenzaron a aterrorizar a los miembros de las tribus
taínas, Ciguayo y Macorix hasta el punto de intentar llevarse a sus
mujeres.
Visto como débil por los españoles e incluso por algunos de su propio
pueblo, Guacanagarix intentó llegar a un acuerdo con los españoles,
quienes veían su sosiego como el de alguien sometido. Lo trataron con
desprecio y hasta tuvieron algunas de sus esposas. El poderoso cacique
de Maguana, Caonabo, no podía soportar las afrentas y atacó a los
europeos, destruyendo el fuerte La Navidad. Guacanagarix estaba
consternado por este giro de los acontecimientos, pero no hizo nada para
ayudar, probablemente esperando que los importunos extranjeros no
regresaran. Sin embargo, regresaron.
En 1.493, Colón regresó a la isla en su segundo viaje y fundó la
primera colonia española en el Nuevo Mundo, la ciudad de La Isabela. En
1.496, su hermano Bartolomé Colón estableció el asentamiento Santo
Domingo de Guzmán en la costa sur, que se convirtió en la nueva capital.
Se estima que los 400.000 taínos que vivían en la isla fueron
esclavizados antes de trabajar en las minas de oro. Como consecuencia de
la opresión, el trabajo forzoso, el hambre, las enfermedades y
asesinatos en masa, se estima que para el 1.508 ese número se había
reducido a alrededor de 50.000. En 1.535, solo 6.000 estaban
vivos. Durante este período, la dirección española cambió de manos varias
veces. Cuando Colón partió en otra exploración, Francisco de Bobadilla
se convirtió en gobernador. Las acusaciones contra Colón por parte de
los colonos debido a su mala gestión se agregó a la situación política
tumultuosa. En 1.502, Nicolás de Ovando sustituye a Bobadilla como
gobernador, con un ambicioso plan para ampliar la influencia española en
la región. Fue él quien tuvo un trato más brutal con la mayoría de los
taínos.
Un rebelde, Guarocuya, liderando un grupo de los que habían huido a
las montañas, atacaron a los españoles en varias ocasiones durante
catorce años. Finalmente, los españoles le ofrecieron un tratado de
paz. Además, le dieron a Enriquillo y sus seguidores su propia ciudad
en 1.534. La ciudad no duró mucho, ya que, varios años después de su
creación, una rebelión de esclavos la quemó, matando a todos los que
se encontraban dentro de la misma.
7. Extinción Taitiana y Esclavitud Africana
En 1501, los monarcas españoles, Fernando e Isabel, concedieron el
primer permiso a los colonizadores del Caribe para importar esclavos
africanos, los cuales comenzaron a llegar a la isla en 1.503. Estos
africanos han ejercido la influencia racial más dominante, y su rica y
antigua cultura ha tenido la segunda influencia tras la europea sobre
el carácter cultural y político de la moderna República Dominicana. En
1.510, la primera gran expedición, que consistió en 250 negros
ladinos, llegó a La Española desde España. Ocho años más tarde
esclavos de origen africano llegaron a las Indias Occidentales. La
posesión española de la isla fue organizada en 1.511 como la Real
Audiencia de Santo Domingo. La caña de azúcar fue introducida a La
Española desde las Islas Canarias, y el primer ingenio
azucarero en el Nuevo Mundo fue establecido en 1.516, en La
Española.
La necesidad de una mano de obra para satisfacer la creciente demanda
del cultivo de la caña de azúcar condujo a un exponencial aumento de
la importación de esclavos en las dos décadas siguientes. Los dueños
de los molinos de azúcar pronto formaron una nueva élite colonial,
convencieron al rey de España para que pudieran elegir a los miembros
de la Real Audiencia de entre sus filas. Los colonos más pobres
subsistían de la caza y las manadas de ganado salvaje que vagaban por
toda la isla y de la venta de sus pieles.
La primera revuelta importante de esclavos en América ocurrió en Santo
Domingo en 1.522, cuando los musulmanes esclavizados de la nación wolof
encabezaron un levantamiento en la plantación de azúcar del almirante
don Diego Colón, hijo de Cristóbal Colón. Muchos de estos insurgentes
lograron escapar a las montañas donde formaron comunidades
cimarronas.
Si bien la caña de azúcar aumentó enormemente los ingresos de España
en la isla, un gran número de los esclavos recién importados huyeron a
las casi intransitables montañas en el interior de la isla, uniéndose
a las crecientes comunidades de cimarrones, literalmente,
"asilvestrados". En la década de 1.530, las bandas cimarronas
se habían vuelto tan numerosas que en las zonas rurales, los españoles
solo podían viajar con seguridad fuera de sus plantaciones en grandes
grupos armados. En la década de 1.540, el mar Caribe había sido
invadido por los piratas ingleses, franceses y holandeses. En 1541
España autorizó la construcción de la muralla de Santo Domingo, y
decidió restringir los viajes por mar a los convoyes armados. Otra
medida, la cual destruiría la industria azucarera de La Española, fue
que en 1.561 La Habana, más estratégicamente ubicada en relación con
la corriente del Golfo, fue seleccionada como el punto de
concentración obligatorio de las flotas mercantes, las cuales tenían
un monopolio real sobre el comercio con las Américas. En 1.564, las
ciudades principales del interior de la isla, Santiago de los
Caballeros y Concepción de La Vega, fueron destruidas por un
terremoto. En la década de 1.560 también los ingleses se sumaron a los
franceses en los asaltos piratas habituales a los barcos
españoles.
8. Declive Colonial
Con la conquista del continente americano, La Española declinó
rápidamente. La mayoría de los colonos españoles abandonaron la isla por
las minas de plata de México y Perú, mientras que los nuevos inmigrantes
españoles omitieron la isla. La agricultura disminuyó, las importaciones
de nuevos esclavos cesó, y los colonos blancos, negros libres y esclavos
por igual vivían en la pobreza, debilitándose la jerarquía racial y
entremezclándose la ayuda, dando lugar a una población predominantemente
mixta entre españoles, africanos, y taínos. A excepción de la ciudad de
Santo Domingo, que logró mantener algunas exportaciones legales, los
puertos dominicanos fueron forzados a confiar en el comercio de
contrabando, que, junto con el ganado, se convirtió en la única fuente
de sustento para los habitantes de la isla. En 1.586, Sir Francis Drake
ocupó la ciudad de Santo Domingo, cobrando un rescate por su retorno al
dominio español.
En 1.605, España, descontenta de que Santo Domingo estaba facilitando
el comercio entre sus otras colonias y otras potencias europeas, ordenó
al gobernador Antonio de Osorio atacar las vastas zonas de las regiones
norte y oeste de la colonia, forzando a sus habitantes a reasentarse más
cerca de la ciudad de Santo Domingo. Esta acción, conocida como
devastaciones de Osorio, resultaron desastrosas, más de la mitad de los
colonos reubicados murieron de hambre o enfermedad. Los bucaneros ingleses y franceses se aprovecharon de la retirada de
España en una esquina de La Española para asentarse en la Isla de la
Tortuga en 1.629. Francia estableció un control directo en 1.640,
reorganizándola como una colonia oficial y ampliando la costa norte de
la isla, aunque esta no sería reconocida por España de manera oficial
hasta la firma del Tratado de Aranjuez de 1.777. En 1.655, Oliver
Cromwell despachó una flota, comandada por el almirante Sir William
Penn, a la conquista de Santo Domingo. Después de encontrarse con una
fuerte resistencia comandada por el Conde de Peñalva, Penn se retiró,
tomando la isla de Jamaica en su lugar. En 1.666 una sucesión de
epidemias de viruela, sarampión y disentería acabó con los últimos
indios y numerosos africanos, dejando el país hundido en la miseria.
9. Colonización canaria
La Casa de Borbón sustituyó a la Casa de Habsburgo en España en 1.700,
e introdujo reformas económicas que poco a poco comenzaron a reactivar
el comercio en Santo Domingo. La corona mitigó progresivamente los
rígidos controles y restricciones sobre el comercio entre España y las
demás colonias. Las últimas flotas navegaron en 1.737; el sistema
portuario monopólico fue abolido poco después. A mediados del siglo, la
población se vio reforzada por las medidas de colonización dictadas por
el rey Carlos III, que impulsaron el incremento de la tradicional
emigración desde las Islas Canarias,
el reasentamiento de la parte norte de la colonia y la plantación de
tabaco en el Valle del Cibao, y la importación de esclavos fue renovada.
La población de Santo Domingo siguió bajando al principio del siglo, de
forma que en el padrón realizado en 1.737 apenas llegaba a los 6000
habitantes. A partir de ese momento, una etapa de mejoría, llevo a que
hubiera aproximadamente 125.000 en 1.790. De esta cifra, unos 40.000,
eran terratenientes blancos, unos 25.000 eran hombres libres de color
negro o mulato, y unos 60.000 eran esclavos. Sin embargo, seguía siendo
pobre y abandonada, sobre todo en contraste con la parte occidental, del
vecino francés de Saint-Domingue, que se convirtió en la colonia más
rica en el Nuevo Mundo y tenía cuatro veces y medio el número de
habitantes. Como las
restricciones sobre el comercio colonial se suavizaron, las elites
coloniales de Saint-Domingue les ofrecieron el mercado principal a los
exportadores de carne, cueros, caoba, y tabaco de Santo Domingo. Otro
factor fueron los éxitos de los corsarios locales durante las guerras
con Gran Bretaña. Con el estallido de la Rebelión de los esclavos contra los colonos
franceses en 1.791, los rebeldes aprovecharon la guerra entre Francia y
España y se refugiaron en la parte española, se unieron a las milicias
dominicanas las cuales estaban constituidas por nativos de Santo
Domingo, de donde viene el gentilicio dominicano, porque en ese entonces
nunca llegaron a Santo Domingo tropas de España para enfrentar a los
franceses. Toussaint Louverture dirigía a los ex-esclavos de Francia en
la parte española, pero luego éste fue reconquistado por los franceses y
traicionó a los dominicanos. En 1.795, Francia obtuvo el control de toda
la isla en virtud del Tratado de Basilea "22 de julio de 1.795".
En 1.801, Louverture arribó a Santo Domingo, para dar rienda suelta a
sus intenciones de someter toda la isla bajo su yugo, incluso consagró
en su constitución que la isla era una e indivisible. Poco después,
Napoleón envió un ejército que dominó a los antiguos esclavos y la
gobernó durante unos meses, pero la fiebre amarilla diezmó a las tropas
de Napoleón, lo que fue aprovechado por los negros que de nuevo se
levantaron en contra de estos franceses en octubre de 1.802 y finalmente
los derrotaron en noviembre de 1.803. El 1 de enero de 1.804 los
vencedores declararon a Saint-Domingue como la república independiente
de Haití. Incluso después de su derrota a manos de los haitianos, una
pequeña guarnición francesa se mantuvo en Santo Domingo. A finales de febrero de 1805, tras haberse coronado emperador,
Jean-Jacques Dessalines "Jacobo I de Haití" invadió, sus
tropas avanzaron por dos rutas, la una por el norte
"Dajabón-Santiago-La Vega-Santo Domingo", comandada por Henri
Christophe, y la otra por el sur " Hincha-San Juan-Azua-Baní-Santo
Domingo ", comandada por Dessalines. En su avance por la ruta sur, el
emperador haitiano halló que los habitantes de San Juan y Baní habían
evacuado sus ciudades para protegerse, por lo que él consideró que la
población autóctona no merecía su clemencia. El 6 de marzo, al
aproximarse a la ciudad capital, Dessalines ordenó incendiar la villa de
San Carlos "ubicada en los extramuros de la capital", e
inició el asedio de la capital. El 25 de marzo ordenó el exterminio
total de la población en su poder, efectuándose un traslado masivo a las
grandes ciudades haitianas para matarles en las plazas públicas mediante
aplastamiento "por caballos y acémilas", y
desmembramiento. Tres días más tarde, arribó a Santo Domingo tres
fragatas y dos bergantines franceses; Dessalines decidió la retirada de
sus tropas a Haití. En abril, Dessalines y Christophe junto a sus tropas
arrasaron Santiago, Moca, Cotuí, La Vega, Azua, San Juan, Baní, entre
otras ciudades, y masacraron a los moradores de estas que no habían
huido a la Cordillera Central, aniquilando a unas diez mil personas.
Estas matanzas sentaron la base de dos siglos de animadversión entre
ambos países. Los franceses ocuparon la parte oriental de la isla, hasta que fueron
derrotados en la Batalla de Palo Hincado el 7 de noviembre de 1.808 por
los habitantes nativos de Santo Domingo, quienes tuvieron como líder al
nativo de Cotuí Juan Sánchez Ramírez, quien era un rico hacendado en su
región,pero aportó toda esa riqueza para defender la causa dominicana de
preservar su nación que tenía tanto de España como de Africa, quedando
tanto él como su familia en una espantosa ruina económica. La
capitulación definitiva de los franceses en la asediada ciudad de Santo
Domingo se produjo el 9 de julio de 1.809, con la ayuda de la Marina
Real Británica.
10. Primera Independencia (1821-1822)
Las autoridades españolas mostraron poco interés en su colonia
restaurada, y el período siguiente se recuerda como la España Boba. Las
grandes familias ganaderas como la del futuro terrateniente y primer
presidente dominicano Pedro Santana llegaron a ser los líderes en el
sureste, la "ley del machete", gobernó por un tiempo. El ex
gobernador y teniente José Núñez de Cáceres declaró la independencia de
la colonia como el estado del Haití Español el 1 de diciembre de 1.821,
solicitando la admisión a la República de la Gran Colombia, pero las
fuerzas de Haití dirigidas por Jean-Pierre Boyer ocuparon el país nueve
semanas más tarde.
El 9 de febrero de 1.822, Boyer entró formalmente en la capital, Santo
Domingo, donde fue recibido por Núñez de Cáceres que le ofreció las
llaves del palacio. Boyer rechazó la oferta diciendo:
"No he venido a esta ciudad como un conquistador sino
por la voluntad de sus habitantes".
11. Ocupación Haitiana (1822-1844)
La ocupación haitiana de veintidós años que siguieron se recuerda por
los dominicanos como un período de régimen militar brutal, aunque la
realidad es más compleja. Se llevaron las expropiaciones de tierras a
gran escala y esfuerzos fallidos por obligar a la producción de cultivos
de exportación, imponer el servicio militar, restringir el uso de la
lengua española y eliminar las costumbres tradicionales, como las peleas
de gallos. A los dominicanos se les reforzó la percepción de sí mismos
como diferentes de los haitianos en
"idioma, raza, religión y costumbres nacionales".
Sin embargo, Boyer fracasó en su intento de abolir la esclavitud, tal
como le sucedió a Toussaint porque ambos desconocían la naturaleza del
sistema esclavista que existía en Santo Domingo, pues era una esclavitud
patriarcal y doméstica. No obstante, igual que Toussaint, Boyer
estableció una especie de esclavitud contra blancos y
mulatos. La constitución de Haití prohibió a los blancos ser propietarios de
tierras, y las familias terratenientes importantes fueron privadas a la
fuerza de sus propiedades. La mayoría emigró a las colonias españolas de
Cuba y Puerto Rico, o hacia la independiente Gran Colombia, por lo
general con el apoyo de funcionarios haitianos, quienes adquirieron sus
tierras. Los haitianos, quienes asociaban la Iglesia Católica con los
amos franceses que los habían explotado antes de la independencia,
confiscaron todos los bienes de la iglesia, todos los clérigos
extranjeros deportados, y se cortaron los lazos con la clerecía restante
en el Vaticano. La Universidad de Santo Domingo, la más antigua en el
Hemisferio Occidental, careciendo de estudiantes, profesores y recursos,
cerró. Para recibir el reconocimiento diplomático de Francia, Haití se
vio obligado a pagar una indemnización de 150 millones de francos a los
antiguos colonos franceses, que se redujo posteriormente a 60 millones
de francos, y debido a esto, Haití impuso pesados impuestos sobre la
parte oriental de la isla. Dado que Haití no pudo suplir provisiones
adecuadas para su ejército, las fuerzas de ocupación sobrevivieron en
gran medida apoderándose o confiscando alimentos y suministros a punta
de pistola. Los intentos de redistribuir la tierra en conflicto con el sistema de
tenencia de la tierra comunal "Terrenos comuneros", que había
surgido con la economía ganadera, y los nuevos esclavos emancipados
resentidos se ven obligados a producir cultivos comerciales bajo el
Código Rural de Boyer. En las zonas rurales, la administración haitiana era por lo general
demasiado ineficiente para hacer cumplir sus propias leyes. Fue en la
ciudad de Santo Domingo que los efectos de la ocupación se sintieron con
más fuerza, y fue allí que el movimiento por la independencia tuvo su
origen.
12. Segunda Independencia (1844-1861)
En 1.838, Juan Pablo Duarte fundó una sociedad secreta llamada
"La Trinitaria", para sacudir el yugo haitiano que junto a sus
posteriores compañeros Matías Ramón Mella y Francisco del Rosario
Sánchez lograran independizar la parte oriental de la isla. En 1.843
se aliaron con un movimiento haitiano para derrocar a Boyer. Debido a
sus pensamientos revolucionarios y lucha por la independencia
dominicana, el nuevo presidente de Haití, Charles Rivière-Hérard,
exilió y encarceló a los principales trinitarios. Al mismo tiempo,
Buenaventura Báez, un exportador de caoba azuano y diputado en la
Asamblea Nacional de Haití, estaba negociando con el Consulado General
de Francia para el establecimiento de un protectorado francés. En una
oportuna insurrección para adelantarse a Báez, el 27 de febrero de
1.844, los Trinitarios declararon su Independencia de la República
Dominicana, con el apoyo de Pedro Santana, un rico ganadero de El
Seibo quien comandó un ejército privado de peones que trabajaban en
sus tierras y que lucharon por la causa revolucionaria formando así
junto a voluntarios patriotas el ejercito independentista
dominicano.
13. Primera República (1844-1861)
La primera constitución de la República Dominicana fue aprobada el 6
de noviembre de 1.844. Se incluyó una forma de gobierno presidencial
con muchas tendencias liberales, pero se vio empañada por el artículo
210, impuesta por Pedro Santana en la Asamblea Constituyente por la
fuerza, dándole los privilegios de una dictadura hasta que la guerra
de independencia terminara. Estos privilegios no solo le sirvieron
para ganar la guerra, sino también le permitió perseguir, ejecutar y
conducir al exilio a sus opositores políticos, entre los que se
encontraron Juan Pablo Duarte. Durante la primera década de
independencia, Haití intentó varias invasiones para reconquistar la
parte oriental de la isla: en 1.844, 1.845, 1.849, 1.853 y
1.855-1.856. Aunque cada una fue malograda, Santana siempre utilizaba
la amenaza de la invasión haitiana como una justificación para la
consolidación de sus poderes dictatoriales. Para la élite dominicana
en su mayoría propietarios de tierras, comerciantes y sacerdotes, la
amenaza de la reconquista por el más poblado Haití fue suficiente para
buscar la anexión a un poder exterior. Ofreciendo las aguas profundas
del puerto de la bahía de Samaná como anzuelo, en las próximas dos
décadas, las negociaciones se hicieron con Gran Bretaña, Francia,
Estados Unidos y España para declarar un protectorado sobre el
país.
Sin carreteras adecuadas, las regiones de la República Dominicana se
desarrollaron en forma aislada unas de otras. En el sur, la economía
estaba dominada por la ganadería
"sobre todo en el sureste de la sabana"
y el corte de caoba y otras maderas duras para la exportación. Esta región
conservó un carácter semi-feudal, con poca agricultura comercial, la
hacienda como unidad social dominante y la mayoría de la población vivía
en un nivel de subsistencia. En el Valle del Cibao, los más ricos campos
agrícolas de la nación, los campesinos complementaron sus cultivos de
subsistencia con el cultivo del tabaco para la exportación, principalmente
hacia Alemania. El tabaco requería menos tierra que la ganadería y se
cultivaba principalmente por pequeños agricultores, quienes dependían de
los comerciantes ambulantes para transportar sus cosechas a Puerto Plata y
Montecristi. Santana antagonizó a los agricultores del Cibao, enriqueciéndose a sí
mismo y a sus seguidores, recurriendo a múltiples impresiones de pesos que
le permitió comprar sus cosechas por una fracción de su valor. En 1848, se
vio obligado a dimitir, y fue sucedido por su vicepresidente, Manuel
Jimenes. Después de volver a dirigir las fuerzas dominicanas contra una
nueva invasión haitiana en 1.849, Santana marchó hacia Santo Domingo,
deponiendo a Jimenes. A petición de éste, el Congreso eligió a
Buenaventura Báez como presidente, pero Báez no estaba dispuesto a servir
de títere de Santana, desafiando su papel como líder reconocido militar
del país. En 1.853, Santana fue elegido presidente para su segundo
mandato, lo que obligó a Báez a buscar el exilio. Tres años más tarde,
después de malograr la invasión haitiana por última vez, negoció un
tratado de arrendamiento de una porción de la península de Samaná con una
compañía estadounidense; la oposición popular lo obligó a abdicar, lo que
permitió que Báez regresara y tomara el poder. Con el tesoro nacional
agotado, Báez imprimió dieciocho millones de pesos para la compra de la
cosecha de tabaco de 1.857 con esta moneda y exportándola por dinero en
efectivo en beneficio de sí mismo y sus seguidores. Los plantadores de
tabaco cibaeños, quienes se arruinaron cuando se produjo la inflación, se
rebelaron, volviendo a recurrir a Santana quien se encontraba en el
exilio, para liderar la rebelión. Después de un año de guerra civil,
Santana tomó Santo Domingo y se instaló como presidente. Cabe destacar que
el periodo de la primera república se distinguió por las pugnas y la
inestabilidad política en el naciente país.
14. Anexión a España y restauración republicana (1861-1865)
Pedro Santana heredó un Gobierno en bancarrota al borde del colapso.
Habiendo fracasado en sus ofertas iniciales para asegurar la anexión a
los EE.UU. o Francia, Santana inició negociaciones con la reina Isabel
II de España, y el Capitán General de Cuba para volver la isla en
colonia Española. La Guerra Civil Estadounidense entregó a los Estados
Unidos incapaces de hacer valer la Doctrina Monroe. En España, el Primer
Ministro Don Leopoldo O' Donnell, abogó por renovar la expansión
colonial, apoyó la idea anexionista llevando a cabo una campaña en el
norte de Marruecos, que conquistó la ciudad de Tetuán. En marzo de
1.861, Santana anexó oficialmente la República Dominicana a
España.
15. Restauración
Esta medida fue rechazada ampliamente y el 16 de agosto de 1.863, se
inició una guerra nacional de restauración en Santiago, donde los
rebeldes establecieron un gobierno provisional. Las tropas españolas
volvieron a ocupar la ciudad, pero los rebeldes huyeron a las montañas a
lo largo de la mal definida frontera con Haití. El presidente haitiano,
Fabre Geffrard proporcionó asilo y armas a los rebeldes dominicanos,
enviando un destacamento de sus guardias presidenciales "los
Tirailleurs", para luchar junto a ellos. Santana inicialmente fue
nombrado Capitán General de la nueva provincia española, pero pronto se
hizo evidente que las autoridades españolas planeaban privarle de su
poder, llevándolo a dimitir en 1.862. Condenado a muerte por el gobierno
provisional, Santana murió en circunstancias misteriosas en 1.864, y se
cree que se suicidó. Las restricciones sobre el comercio, la
discriminación contra la mayoría de mulatos, los rumores de que España
tenía la intención de volver a imponer la esclavitud, y una campaña
impopular por el nuevo arzobispo español contra uniones
extramatrimoniales, se extendieron después de décadas de abandono por
parte de la Iglesia Católica, todos los resentimientos alimentados de la
dominación española. Limitados a las grandes ciudades, el ejército
español fue incapaz de derrotar la guerrilla o contener la insurrección,
y sufrió fuertes pérdidas debido a la fiebre amarilla. Las autoridades
coloniales españolas alentaron a la reina Isabel II, a abandonar la
isla,
ya que veían la ocupación como una pérdida sin sentido de tropas y
dinero. Sin embargo, los rebeldes se encontraban en un estado de
desorden político, y fueron incapaces de presentar un conjunto coherente
de demandas. El primer presidente del gobierno provisional, José Antonio
Salcedo "aliado con Báez", fue depuesto por el general Gaspar
Polanco, en septiembre de 1.864, que, a su vez, fue depuesto por el
general Antonio Pimentel tres meses después. Los rebeldes formalizaron
su gobierno provisional por parte de la celebración de una convención
nacional en febrero de 1.865, que promulgó una nueva constitución, pero
el nuevo gobierno ejerció poca autoridad sobre los caudillos
guerrilleros de las distintas regiones, que fueron en gran medida
independientes unos de otros. Incapaz de extraer concesiones de los
rebeldes desorganizados, cuando la Guerra Civil Estadounidense terminó
en marzo de 1.865, la reina Isabel II, anuló la anexión y la
independencia fue restaurada, con las últimas tropas españolas saliendo
antes de julio.
16. Segunda República (1865-1916)
Por el momento los españoles salieron, la mayoría de las principales
ciudades en ruinas y la isla se dividió entre varias decenas de caudillos.
José María Cabral controlaba la mayor parte de Barahona y el suroeste con
el apoyo de los socios exportadores de caoba de Báez, mientras que el
ganadero Cesáreo Guillermo reunió a una coalición de ex generales
"santanistas", en el sureste, y Gregorio Luperón controlaba la
costa norte. Desde la retirada española para 1.879, hubo veintiún cambios
de gobierno y por lo menos cincuenta levantamientos militares.
En el curso de estos conflictos, surgieron dos partidos. El
"Partido Rojo" (conservador), representado por el ganadero
del sur exportador de caoba, Buenaventura Báez, quien continuó buscando la
anexión por una potencia extranjera. El "Partido Azul",
(liberal), dirigido por Gregorio Luperón, representando a los
agricultores de tabaco y comerciantes del Cibao y Puerto Plata de
tendencia nacionalista y liberal en su orientación. Durante estas guerras,
el reducido y corrupto ejército nacional fue superado en número por las
milicias organizadas y mantenidas por los caudillos locales quienes se
autoproclamaban gobernadores provinciales. Estas milicias fueron llenadas
por agricultores, peones o trabajadores de las plantaciones sin tierras
inculcados en el servicio militar quienes por lo general se dedicaban al
bandolerismo cuando no había ninguna revolución. Alrededor de un mes de la victoria nacionalista, Cabral, cuyas tropas
fueron las primeras en entrar en Santo Domingo, derrocó a Pimentel, pero
unas semanas después, el general Guillermo encabezó una rebelión en apoyo
a Báez, forzando a Cabral a dimitir y permitir a Báez volver a tomar la
presidencia en octubre. Báez fue derrocado por los agricultores del Cibao
bajo el mando de Luperón, líder del Partido Azul, en la primavera
siguiente, pero los aliados de Luperón se volvieron el uno contra el otro
y Cabral se reinstaló a sí mismo como presidente con un golpe de Estado en
1.867. Después de llevarse varios "azulistas", a su gabinete los
"rojos" se rebelaron, volviendo Báez al poder. En 1.869, Báez
negoció un tratado de anexión con los Estados Unidos.
Con el apoyo del Secretario de Estado de los Estados Unidos, William H.
Seward, quien esperaba establecer una Armada en Samaná, en 1.871 el
tratado fue anulado en el Senado de los Estados Unidos a través de los
esfuerzos del senador abolicionista Charles Sumner. En 1.874, el gobernador de Puerto Plata y miembro del Partido Rojo
Ignacio María González Santín, organizó un golpe de Estado en apoyo de una
rebelión del Partido Azul, pero fue depuesto por los Azules dos años
después. En febrero de 1.876, Ulises Espaillat, respaldado por Luperón,
fue nombrado presidente, pero diez meses más tarde las tropas leales a
Báez lo retornaron al poder. Después de un año una nueva rebelión le
permitió a González Santín tomar el poder, solo para ser depuesto por
Cesáreo Guillermo en septiembre de 1.878, que a su vez fue derrocado por
Luperón, en diciembre de 1.879. Gobernando el país desde su ciudad natal
Puerto Plata, disfrutando de un auge económico debido a las exportaciones
de tabaco hacia Alemania, Luperón promulgó una nueva Constitución
estableciendo un límite de dos años de mandato presidencial mediante
elecciones directas, suspendió el sistema semi-formal de sobornos e inició
la construcción del primer ferrocarril del país, que une la ciudad de La
Vega con el puerto de Sánchez en la bahía de Samaná.
La Guerra de los Diez Años en Cuba trajo plantadores de azúcar cubanos
para el país en busca de nuevas tierras y seguridad de la insurrección
que liberó a sus esclavos y destruyó sus propiedades. La mayoría se
estableció en la llanura costera del sureste, y, con la asistencia del
gobierno de Luperón, construyeron los primeros molinos de azúcar
mecanizados de la nación. A ellos se unieron más tarde los italianos,
los alemanes, los puertorriqueños y los estadounidenses en la formación
del núcleo de la burguesía azucarera dominicana, casarse y formar
familias prominentes para consolidar su posición social. Las
interrupciones de la producción mundial causada por la Guerra de los
Diez Años, la Guerra Civil Estadounidense y la Guerra Franco-Prusiana
permitió a la República Dominicana convertirse en un importante
exportador de azúcar. Durante las dos décadas siguientes, el azúcar
superó al tabaco como el principal producto de exportación, mientras que
los antiguos caseríos de pesca de San Pedro de Macorís y La Romana se
transformaron en prósperos puertos. Para satisfacer su necesidad de un
mejor transporte, más de 300 kilómetros de líneas privadas de
ferrocarril fueron construidos por y para servir a las plantaciones de
azúcar en 1.897.
Una caída de los precios en 1.884 llevó a la congelación salarial, y una
posterior escasez de mano de obra fue ocupada por inmigrantes
trabajadores de la Islas de Sotavento, las Islas Vírgenes, Saint Kitts y
Nevis, Anguila y Antigua
(referidos por los dominicanos como "cocolos"). Estos negros de habla inglesa fueron a menudo víctimas de
racismo, pero muchos permanecieron en el país, encontrando trabajo como
estibadores y en las construcciones de ferrocarriles y en las refinerías
de azúcar.
17. Dictadura de Ulises Heureaux y posterior bancarrota
la dictadura del general Ulises Heureaux, quien era conocido
popularmente como "Lilís", trajo una estabilidad sin precedentes
al país a través de un gobierno de mano dura que duró casi dos décadas.
Hijo de padre haitiano y madre sainthomasana, Lilís se distinguió por
ser el segundo presidente negro de los dominicanos, después de Luperón.
Se desempeñó como presidente en los periodos 1.882-1.883, 1.887 y
1.889-1.899, ejerciendo el poder a través de una serie de presidentes
títeres cuando no ocupaba el cargo. La incorporación de los Rojos y los
Azules en su gobierno, desarrolló una extensa red de espías e
informantes para aplastar a la potencial oposición. Su gobierno
emprendió una serie de grandes proyectos de infraestructura, incluyendo
la electrificación de Santo Domingo, el comienzo del servicio telefónico
y telegráfico, la construcción de un puente sobre el río Ozama, y la
realización de un ferrocarril de vía única que uniendo a Santiago y
Puerto Plata, financiado por la Westendorp Co. con sede en Ámsterdam.La
dictadura de Lilís fue dependiente de fuertes endeudamientos de bancos
europeos y estadounidenses para enriquecerse, estabilizar la deuda
existente, fortalecer el sistema de soborno, pagar por el ejército,
financiación para el desarrollo de infraestructura y ayudar a establecer
fábricas de azúcar. Sin embargo, los precios del azúcar experimentaron
un fuerte descenso en las dos últimas décadas del siglo 19. Cuando la
Westendorp Co. se declaró en quiebra en 1.893, se vio obligado a
hipotecar las tasas aduaneras de la nación, la principal fuente de
ingresos del gobierno, a una empresa financiera de Nueva York llamada
San Domingo Improvement Co. (SDIC), la cual se hizo cargo de su
contrato del ferrocarril y de las reclamaciones de sus tenedores de
bonos europeos a cambio de dos préstamos, uno de $1.2 millones y otro de
£2 millones. A medida que la deuda pública crecía se hizo imposible
mantener su maquinaria política, Heureaux se basó en préstamos secretos
de la SDIC, plantadores de azúcar y comerciantes locales. En 1.897, con
su gobierno prácticamente en bancarrota, Lilís imprime cinco millones de
pesos inorgánicos, conocidos como "Las papeletas de
Lilís", arruinando la mayoría de los comerciantes dominicanos e
inspirando una conspiración que terminó en su asesinato. En 1.899,
cuando Lilís fue asesinado por los comerciantes de tabaco del Cibao que
habían estado pidiendo un préstamo, la deuda nacional era más de $35
millones, quince veces el presupuesto anual. Los seis años posteriores
a la muerte de Lilís fueron testigo de cuatro revoluciones y cinco
presidentes diferentes. Los políticos del Cibao, que habían conspirado
contra Heureaux, Juan Isidro Jimenes, el más rico plantador de tabaco
del país, y el general Horacio Vásquez, después de haber sido nombrados
presidente y vice-presidente, cayeron rápidamente debido a la división
del botín entre sus partidarios en jimenistas y horacistas. Las tropas
leales a Vásquez derrocaron a Jimenes en 1.903, pero Vásquez fue
depuesto por el general jimenista Alejandro Woss y Gil, que tomó el
poder por sí mismo. Los jimenistas derrocaron su gobierno, pero su
líder, Carlos Morales Languasco, se negó a devolver el poder a Jimenes,
aliándose con los horacistas, lo que conllevó a una nueva revuelta por
sus aliados jimenistas traicionados.Con la nación al borde de la
rebeldía, Francia, Alemania, Italia y los Países Bajos enviaron buques
de guerra a Santo Domingo para presionar en reclamo de sus compatriotas.
Con el fin de anticiparse a la intervención militar, el presidente de
estadounidense Theodore Roosevelt introdujo el Corolario Roosevelt a la
Doctrina Monroe, declarando que Estados Unidos asumiría la
responsabilidad de garantizar que las naciones de América Latina
cumplieran con sus obligaciones financieras. En enero de 1.905, en
virtud de este corolario, los Estados Unidos asumieron la administración
de las aduanas de la República Dominicana. Bajo los términos de este
acuerdo, un Receiver General, nombrado por el presidente de los EE.UU.,
mantuvo el 55 % del total de ingresos para pagar a los demandantes
extranjeros, mientras que remitió un 45 % al gobierno dominicano.
Después de dos años, la deuda externa del país se redujo de $40 millones
a $17 millones. En 1907, este acuerdo se convirtió en un tratado,
transfiriendo el control de pagos de aduana a la Bureau of Insular
Affairs de los EE.UU. y concediendo un préstamo de $20 millones de un
banco de Nueva York como abono para reclamaciones pendientes, haciendo
que los Estados Unidos sea el único acreedor extranjero de la República
Dominicana. En 1.905, el peso Dominicano fue reemplazado por el dólar de
EE.UU. En 1.906, Morales Languasco renunció y el horacista y
vice-presidente Ramón Cáceres se convirtió en presidente. Después de
suprimir una rebelión en el noroeste por el general jimenista Desiderio
Arias, su gobierno trajo estabilidad política y crecimiento económico,
con la ayuda de las nuevas inversiones estadounidenses en la industria
del azúcar. Sin embargo, su asesinato en 1.911, para el que Morales
Languasco y Arias fueron indirectamente responsables, una vez más sumió
a la república en el caos. Durante dos meses, el poder ejecutivo estaba
en manos de una junta civil dominada por el jefe del ejército, el
general Alfredo Victoria. El superávit de más de 4 millones de pesos
dejado por Cáceres se gastó rápidamente para suprimir una serie de
insurrecciones. Obligó al congreso a elegir a su tío, Eladio Victoria,
como presidente, pero éste pronto fue sustituido por el Arzobispo Adolfo
Alejandro Nouel. Después de cuatro meses, Nouel renunció, y fue sucedido
por el horacista congresista José Bordas Valdez, quien aliado con Arias
y los jimenistas mantuvieron el poder. En 1.913, Vásquez regresó del
exilio en Puerto Rico para llevar una nueva rebelión. En junio de 1.914,
el presidente estadounidense Woodrow Wilson emitió un ultimátum para que
las dos partes pongan fin a las hostilidades y acuerden un nuevo
presidente, o los Estados Unidos impondrían uno. Después de la
presidencia provisional de Ramón Báez, Jimenes fue elegido en octubre, y
pronto se enfrentó a las nuevas demandas, incluyendo el nombramiento de
un director estadounidense de obras públicas y asesor financiero y a la
creación de una nueva fuerza militar al mando de oficiales de EE.UU.. El
Congreso Nacional rechazó estas demandas y comenzó el proceso de
destitución contra Jimenes. Los Estados Unidos ocuparon Haití en julio
de 1.915, con la amenaza implícita de que la República Dominicana podría
ser la próxima. El Ministro de Guerra de Jimenes, Desiderio Arias
organizó un golpe de estado en abril de 1.916, proporcionando un
pretexto para que los Estados Unidos ocuparan la República
Dominicana.
18. Primera ocupación estadounidense (1916-1924)
La Infantería de Marina de los Estados Unidos desembarcó en Santo
Domingo el 15 de mayo de 1.916. Antes de su llegada, Jimenes dimitió,
negándose a ser sometido por ningún extranjero. El 1 de junio, los
marines ocuparon Montecristi y Puerto Plata, y, después de una breve
campaña, toman la fortaleza de Santiago a principios de julio. El
Congreso Nacional eligió al doctor Francisco Henríquez y Carvajal como
presidente, pero en noviembre, después de que él se negó a satisfacer
las demandas de EE.UU., Wilson anunció la imposición de un gobierno
militar estadounidense, con el contralmirante Harry Shepard Knapp como
Gobernador Militar. El gobierno militar estadounidense implementó muchas
de las reformas institucionales llevadas a cabo en los Estados Unidos
durante la Era Progresista "Progressive Era", incluyendo la
reorganización del sistema tributario, contabilidad y administración, la
expansión de la educación primaria, la creación de una fuerza de policía
nacional para unificar el país, y la construcción de un sistema nacional
de carreteras, incluida una carretera que uniría Santiago a Santo
Domingo. A pesar de las reformas, prácticamente todos los dominicanos
resentían la pérdida de su soberanía a los extranjeros, algunos de los
cuales hablaban español o que mostraban verdadera preocupación por el
bienestar de la nación, y el gobierno militar, incapaz de ganar el
respaldo de cualquiera de los prominentes líderes políticos dominicanos,
impuso leyes estrictas y encarcelaba a los críticos de la ocupación. En
1.920, las autoridades de los EE.UU. promulgaron una Ley de Registro de
Tierras, la cual desarticuló los terrenos comuneros y miles de
campesinos desposeídos carecían de títulos formales sobre las tierras
que ocupaban, mientras legalizaban títulos falsos en poder de las
compañías azucareras. En el sureste, los campesinos desposeídos formaron
bandas armadas, llamados gavilleros, librando una guerra de guerrillas
que se prolongó hasta la duración de la ocupación, con la mayoría de los
combates en Hato Mayor y El Seibo. En un momento dado, los marines
enfrentaron de ocho a doce gavilleros, cada uno compuesta de varios
cientos de seguidores. Los guerrilleros se beneficiaron de un
conocimiento superior del terreno y el apoyo de la población local,
obligando a los marines a confiar en los métodos de contrainsurgencia
cada vez más brutales. Sin embargo, las rivalidades entre los diversos
gavilleros a menudo los llevó a pelear unos contra otros, e incluso
cooperar con las autoridades de ocupación. Además, los cismas culturales
entre los campesinos y los habitantes de la ciudad les impidieron a la
guerrilla cooperar con el movimiento nacionalista de la clase media
urbana. En el valle de San Juan, cerca de la frontera con Haití, los
seguidores de un curandero vudú llamado Liborio, resistieron a la
ocupación y ayudaron a los cacos haitianos en su guerra contra los
estadounidenses, hasta su muerte en 1.922. El principal legado de la
ocupación fue la creación de un Cuerpo Nacional de Policía, utilizado
por los infantes de marina para ayudar a luchar contra las diferentes
guerrillas, y más tarde el vehículo principal para el ascenso de Rafael
Leónidas Trujillo.En lo que se conoce como
"la danza de los millones", con la destrucción de las
producciones europeas de remolacha azucarera durante la Primera Guerra
Mundial, el precio de la azúcar llegó a su nivel más alto en la
historia, de 5.50 dólares en 1.914 a $22.50 por libra en 1920. Las
exportaciones dominicanas de azúcar aumentaron de 122.642 toneladas en
1.916 a 158.803 toneladas en 1.920, ganando un récord de 45.3 millones
de dólares. Sin embargo, la producción europea de remolacha azucarera
se recuperó rápidamente, lo que, junto con el crecimiento de la
producción mundial de caña de azúcar, saturó el mercado mundial,
haciendo que los precios cayeran en picada a solo 2.00 dólares a finales
de 1.921. Esta crisis llevó a muchos de los plantadores de azúcar
locales a la quiebra, lo que permitió a grandes conglomerados de EE.UU.
dominar la industria azucarera. En 1.926, solo veintiuna propiedades
principales se mantuvieron, ocupando unos 520.000 acres
( 2100 km² ). De estos, doce empresas de propiedad estadounidense
eran dueñas de más del 81 % de la superficie total. Mientras que los
plantadores extranjeros que habían construido la industria azucarera
integrada en la sociedad dominicana, estas corporaciones expatriaron sus
beneficios a los Estados Unidos. Como los precios bajaron, las
plantaciones de azúcar cada vez más dependían de los trabajadores
haitianos. Esto se vio facilitado por la introducción de contrato de
trabajo regulado por parte del gobierno militar, el crecimiento de la
producción de azúcar en el suroeste, cerca de la frontera con Haití, y
una serie de huelgas llevadas a cabo por los cocolos cortadores de caña
organizado por la "Universal Negro
Improvement Association". En las elecciones presidenciales de
1.920 en los Estados Unidos, el candidato republicano Warren Harding,
criticó la ocupación y prometió una eventual retirada de los EE.UU..
Mientras que Jimenes y Vásquez solicitaban concesiones de los Estados
Unidos, el colapso de los precios del azúcar desacreditó el gobierno
militar y dio lugar a una nueva organización política nacionalista, la
Unión Nacional Dominicana, liderada por el Dr. Henríquez y Carvajal
desde el exilio en Santiago de Cuba, el cual exigió la retirada
incondicional. Formaron alianzas con los nacionalistas frustrados en
Puerto Rico y Cuba, así como con los críticos de la ocupación en los
propios Estados Unidos, más notablemente con The Nation y la Haiti-San
Domingo Independence Society. En mayo de 1.922, un abogado dominicano,
Francisco J. Peynado, fue a Washington y negoció lo que se conoce como
el Plan Hughes-Peynado. Se estipuló el establecimiento inmediato de un
gobierno provisional en espera de las elecciones, la aprobación de todas
las leyes promulgadas por el gobierno militar de EE.UU., y la
continuación del tratado de 1.907, hasta que todas las deudas externas
de la República Dominicana hubieran sido saldadas. El 1 de octubre, Juan
Bautista Vicini Burgos, el hijo de un rico inmigrante italiano plantador
de azúcar, fue nombrado presidente provisional, y comenzó el proceso de
retirada de los EE.UU..
19. Tercera República (1924-1966)
La ocupación estadounidense terminó en 1.924, con un gobierno elegido
democráticamente bajo la presidencia de Horacio Vásquez. En un esfuerzo
por conservar el poder de sus seguidores, en 1.927, Vásquez extendió su
mandato de cuatro a seis años. Había una base jurídica discutible para
el cambio, el cual fue aprobado por el Congreso, pero su efectiva
promulgación invalidaba la constitución de 1.924 que Vásquez había
jurado defender. La Gran Depresión redujo los precios del azúcar a menos
de $1 por libra. Las elecciones estaban previstas para mayo de 1.930,
pero de la forma que Vásquez había extendido su periodo presidencial
creó suspicacias sobre la imparcialidad de las elecciones. En febrero,
fue proclamada una revolución en Santiago por un abogado llamado Rafael
Estrella Ureña. Cuando el comandante de la Guardia Nacional Dominicana
"la actual Policía Nacional creada bajo la ocupación",
Rafael Leónidas Trujillo, ordenó a sus tropas a permanecer en sus
cuarteles, el enfermo y envejeciente Vásquez se vio obligado a exiliarse
y a proclamar a Estrella presidente provisional. En mayo, Trujillo fue
elegido con el 95 % de los votos, habiendo utilizado al ejército para
acosar e intimidar al personal electoral y a sus posibles opositores.
Después de su toma de posesión en agosto, a petición suya, el Congreso
Dominicano proclamó el comienzo de la "Era de
Trujillo".
20. La "Era de Trujillo" (1930-1961)
Rafael Leónidas Trujillo estableció el control político absoluto con
severa represión de los derechos humanos nacionales, mientras que
fomentaba el desarrollo económico
"del que sobre todo él y sus partidarios se beneficiaron". Trujillo
utilizó su partido político, el Partido Dominicano, como un sello
gomígrafo de sus decisiones. La verdadera fuente de su poder fue la
Guardia Nacional, la institución más grande, mejor armada, y la más
centralmente controlada que cualquier fuerza militar en la historia de la
nación. Al disolver las milicias regionales, eliminar los infantes de
marina (la principal fuente de potencial oposición), convirtiendo
la Guardia Nacional en un virtual monopolio del poder. El régimen de
Trujillo se preocupó por expandir la Guardia Nacional como una de las
mayores fuerzas militares de América Latina, por 1.940, el gasto militar
dominicano fue del 21 % del presupuesto nacional. Al mismo tiempo,
desarrolló un elaborado sistema de agencias de espionaje. A finales de
1.950, hubo al menos siete categorías de agencias de inteligencia,
espiándose una con otra, así como al pueblo. Todos los ciudadanos eran
obligados a llevar tarjetas de identificación y los pases de buena
conducta de la policía secreta. Obsesionado con la adulación, Trujillo
promovió un culto a su extravagante personalidad. Cuando un huracán azotó
Santo Domingo en 1.930, matando a más de 3.000 personas, Trujillo
reconstruyó la ciudad y la bautizó como "Ciudad Trujillo", además
cambió el nombre de la montaña más alta del país y del Caribe, el Pico
Duarte por "Pico Trujillo". Más de 1.800 estatuas de Trujillo
fueron construidas, y todos los proyectos de obras públicas requerían
tener una placa con la inscripción
"Era de Trujillo, Benefactor de la Patria". Como las fincas
azucareras se dirigieron a Haití para contratar trabajadores migrantes
estacionarios, incrementando el asentamiento en la República Dominicana de
manera permanente, el censo de 1.920, llevado a cabo por el gobierno
estadounidense de ocupación, dio un total de 28.258 haitianos viviendo en
el país; para 1935 hubo 52.657 haitianos. En 1.937, Trujillo ordenó la
masacre de 17.000 a 35.000 haitianos, alegando que los exiliados haitianos
en República Dominicana estaban conspirando para derrocar su régimen
"aunque se le atribuye la ley del ojo por ojo, tratando de
cobrarse las masacres hechas por Haití al país en épocas anteriores". Este evento más tarde se conoció como "El Corte". La masacre
fue recibida con críticas internacionales. El asesinato fue el resultado
de una nueva política de Trujillo llamada
"dominicanización de la frontera". Los nombres de lugares a lo
largo de la frontera fueron cambiados de creole y francés al español, la
práctica del vudú fue declarada ilegal, se impusieron cuotas sobre el
porcentaje de trabajadores extranjeros que las empresas podían contratar,
y se aprobó una ley que impedía a los trabajadores haitianos permanecer en
el país después de la cosecha de azúcar.Aunque Trujillo trató de emular al
Generalísimo Francisco Franco, dio la bienvenida a los refugiados
republicanos españoles tras la Guerra Civil Española. Durante el
Holocausto en la Segunda Guerra Mundial, la República Dominicana dio asilo
en muchos judíos que escapaban de Hitler que habían sido rechazados por
otros países. Estas decisiones surgieron de una política de blanquismo,
estrechamente relacionada con la xenofobia anti-haitiana, que trataba de
agregar más blancos a la población dominicana mediante el fomento de la
inmigración procedente de Europa. En el marco de la Política de buena
vecindad, en 1940, el Departamento de Estado de los Estados Unidos firmó
un tratado con Trujillo renunciando al control de aduanas de la nación.
Cuando los japoneses atacaron Pearl Harbor, Trujillo siguió los pasos de
los Estados Unidos declarándole la guerra a las Potencias del Eje, a pesar
de que había profesado abiertamente su admiración por Hitler y Mussolini.
Durante la Guerra Fría, Trujillo mantuvo lazos estrechos con los Estados
Unidos, declarándose a sí mismo como el "anticomunista número uno",
del mundo y convirtiéndose en el primer presidente de América Latina en
firmar un Convenio de Asistencia de Mutua Defensa con los Estados Unidos.
Trujillo y su familia establecieron un cuasi-monopolio sobre la economía
nacional. En el momento de su muerte, había acumulado una fortuna de
alrededor de $800 millones, él y su familia poseían un 50-60 por ciento de
las tierras cultivables, alrededor de 700.000 acres "2800 km²", y
las empresas de propiedad de Trujillo el 80 % de la actividad comercial en
la capital. Explotó el sentimiento nacionalista para comprar la mayoría
de las plantaciones de azúcar de la nación y refinerías de las
corporaciones de EE.UU.; operó un monopolio en el comercio de sal, arroz,
leche, cemento, tabaco, café, y las aseguradoras; se apropió de dos
grandes bancos, varios hoteles, de las instalaciones portuarias, la línea
aérea y una línea de transporte marítimo; descontó el 10 % de los sueldos
de todos los empleados públicos "supuestamente para su partido", y
recibió una porción de los ingresos de la prostitución. La Segunda Guerra
Mundial trajo una mayor demanda de las exportaciones dominicanas, y la
década de 1.940, y principios de 1.950, fueron testigo de un crecimiento
económico y de una expansión considerable de la infraestructura nacional.
Durante este período, la capital pasó de ser solo un centro administrativo
para el centro nacional de transporte marítimo y la industria, aunque era
pura "coincidencia", que por las nuevas carreteras a menudo se
llevaban las plantaciones y las fábricas de Trujillo, y los nuevos puertos
beneficiaban el envío de exportación de las empresas de Trujillo. La mala
administración y la corrupción dieron lugar a grandes problemas
económicos. A finales de la década de 1.950, la economía se estaba
deteriorando a causa de una combinación de exceso de gastos en un festival
para celebrar el 25 aniversario del régimen, un gasto excesivo para la
compra de molinos de azúcar y plantas de electricidad privadas, y una
decisión de hacer una gran inversión en la producción de azúcar estatal
resultó económicamente un fracaso. En 1.956, los agentes de Trujillo en
Nueva York mataron a Jesús Galíndez, un exiliado vasco que había trabajado
para Trujillo, pero que más tarde denunció el régimen de Trujillo y lo
había puesto en la opinión pública en los Estados Unidos. En agosto de
1.960, la Organización de Estados Americanos (OEA), impuso
sanciones diplomáticas contra la República Dominicana como resultado de la
complicidad de Trujillo en un intento de asesinar al presidente venezolano
Rómulo Betancourt.Ante el temor de que el país se podría unir en contra de
Trujillo y ser sustituido por los comunistas, la CIA ayudó a un grupo de
disidentes dominicanos para asesinar a Trujillo en una persecución
automovilística camino a su casa de campo cerca de San Cristóbal el 30 de
mayo de 1.961. Las sanciones se mantuvieron en vigor después del asesinato
de Trujillo. Su hijo Ramfis asumió el control de facto, pero fue depuesto
por sus dos tíos, después de una disputa sobre la posible liberalización
del régimen. En noviembre de 1961 surge el levantamiento militar de la
"Rebelión de los Pilotos", y la familia Trujillo se vio obligada a
exiliarse, huyendo a Francia, y el hasta ese momento presidente títere
Joaquín Balaguer asumió el poder definitivo.
21. La inestabilidad post - dictadura y segunda ocupación Estadounidense (1965-1966)
Ante la insistencia de los Estados Unidos, Balaguer se vio obligado a
compartir el poder con un Consejo de Estado conformado por siete miembros,
establecido el 1 de enero de 1.962, e incluyendo moderados miembros de la
oposición. Las sanciones de la OEA se levantaron el 4 de enero, y, después
de un intento de golpe de Estado, Balaguer, renunció y se marchó al exilio
el 16 de enero. El reorganizado Consejo de Estado, bajo la presidencia de
Rafael Filiberto Bonnelly encabezó el gobierno dominicano hasta que pudieran
celebrarse elecciones. Estas elecciones, en diciembre de 1.962, fueron
ganadas por Juan Bosch, un erudito y cuentista que había fundado en el
exilio al opositor Partido Revolucionario Dominicano (PRD), durante
los años de Trujillo. Sus políticas de izquierda, incluyendo la
redistribución de tierras, la nacionalización de determinada participación
extranjera, y los intentos llevar a los militares bajo el control civil,
irritó a los oficiales militares, la jerarquía católica, y a la clase alta,
que temían "otra Cuba". En septiembre de 1.963, Bosch fue derrocado
por un golpe militar de derecha encabezado por el coronel Elías Wessin y
Wessin y fue reemplazado por una junta militar de tres hombres. Bosch
fue al exilio en Puerto Rico.
Más tarde, un triunvirato civil estableció supuestamente una dictadura de
facto hasta el 16 de abril de 1.965, cuando la creciente insatisfacción
generó otra rebelión militar el 24 de abril de 1.965 que exigía la
restauración de Bosch. Los insurgentes, oficiales reformistas civiles y
combatientes leales a Bosch al mando del coronel Francisco Alberto
Caamaño, y que se hacían llamar los constitucionalistas, efectuaron un
golpe de estado, tomando el palacio nacional. Inmediatamente, las fuerzas
militares conservadoras, encabezadas por Wessin y Wessin y quienes
se hacían llamar leales, respondieron con ataques de tanques y bombardeos
aéreos contra Santo Domingo.
El 28 de abril de 1.965, los militares del ejército anti-Boschistas
solicitaron la intervención militar de EE.UU. y las fuerzas de EE.UU.
desembarcaron, ostensiblemente para proteger a los ciudadanos
estadounidenses y evacuar a otros ciudadanos extranjeros. En lo que fue
inicialmente conocido como Operation Power Pack, 23.000 tropas
estadounidenses fueron enviadas a la República Dominicana.
Denegando la victoria militar, los rebeldes constitucionalistas
rápidamente formaron un Congreso constitucionalista eligiendo a Caamaño
presidente del país. Los Funcionarios estadounidenses se opusieron y
apoyaron general Antonio Imbert Barrera. El 7 de mayo, Imbert Barrera fue
juramentado como presidente del llamado Gobierno de Reconstrucción
Nacional. El siguiente paso en el proceso de estabilización, según lo
previsto por Washington y la OEA, fue arreglar un acuerdo entre el
presidente Caamaño, y el presidente Imbert Barrera para formar un gobierno
provisional comprometido a elecciones anticipadas. Sin embargo, Caamaño se
negó a reunirse con Imbert hasta que varios de los oficiales leales,
incluyendo Wessin y Wessin, se hicieron para salir del país.
El 13 de mayo el general Imbert comenzó la Operación LIMPIEZA y sus
fuerzas tuvieron éxito en la eliminación de focos de resistencia rebelde
fuera de Ciudad Nueva y en censurar a Radio Santo Domingo. La Operación
LIMPIEZA terminó el 21 de mayo. El 14 de mayo los estadounidenses establecieron un "corredor de
seguridad", que conectaba la Base Aérea de San Isidro y el Puente
Duarte con el Hotel Embajador y la Embajada de Estados Unidos en el centro
de Santo Domingo, tuvo esencialmente acordonado a la zona
constitucionalista de Santo Domingo. Las carreteras fueron bloqueadas y
las patrullas corrían continuamente. Unos 6.500 personas de muchas
naciones fueron evacuadas a un lugar seguro. Además, las fuerzas de EE.UU.
lanzaban por aire grandes suministros de socorro para los nacionales
dominicanos. A mediados de mayo, la mayoría de la OEA votó por la Operación PUSH
AHEAD, la reducción de las fuerzas de Estados Unidos y su sustitución por
una Fuerza Interamericana de Paz (IAPF). La Fuerza Interamericana
de Paz (IAPF), se constituyó formalmente el 23 de mayo. Las
siguientes tropas fueron enviadas por cada país: Brasil - 1.130, Honduras
- 250, Paraguay - 184, Nicaragua - 160, Costa Rica - 21 policías
militares, y El Salvador - 3 oficiales de Estado Mayor. El primer
contingente en llegar fue una compañía de fusileros de Honduras que pronto
fueron respaldados por destacamentos de Costa Rica, El Salvador y
Nicaragua. Brasil presentó la mayor unidad, un batallón blindado de
infantería. El general brasileño Hugo Alvim asumió el mando de las fuerzas
terrestres de la OEA, y el 26 de mayo las fuerzas de EE.UU. comenzaron a
retirarse. La lucha continuó el 31 de agosto de 1.965, cuando se declaró una tregua.
La mayoría de las tropas estadounidenses se marcharon poco después y la
vigilancia y las operaciones de paz fueron entregados a las tropas
brasileñas, pero un remanente de los militares de EE.UU. se mantuvo hasta
septiembre de 1.966. Un total de 44 soldados estadounidenses murieron, 27
en acción. 172 resultaron heridos en acción. Se estima que entre 6.000 y
10.000 dominicanos murieron, la mayoría civiles. Frente a las amenazas y los ataques en curso, incluyendo un ataque
particularmente violento en el Hotel Matum en Santiago de los Caballeros,
Caamaño aceptó un acuerdo impuesto por el gobierno de EE.UU.. El
Presidente Provisional dominicano, García Godoy, envió al coronel Caamaño
como Agregado Militar de la Embajada Dominicana en el Reino Unido.
22. Los doce años de Balaguer (1966-1978)
En junio de 1966, Joaquín Balaguer, líder del Partido Reformista
"que más tarde se
convirtió en el Partido Reformista Social Cristiano (PRSC)", fue
elegido y reelegido para el cargo en mayo de 1.970 y mayo de 1.974, en ambas
ocasiones después de que los principales partidos de oposición se retiraran
a finales de la campaña por el alto grado de violencia de los grupos
pro-gubernamentales. El 28 de noviembre de 1.966 se creó una nueva
constitución, firmada y puesta en uso. La constitución indicaba que un
presidente debía ser elegido para un mandato de cuatro años. Si había una
elección cerrada, habría una segunda vuelta de votación para decidir el
ganador. La edad de votar era de dieciocho años, pero las personas casadas
menores de dieciocho años también podían votar. Balaguer llevó a la
República Dominicana a través de una profunda reestructuración económica,
basada en la apertura del país a la inversión extranjera, mientras protegía
las industrias de propiedad estatal y de determinados intereses privados. La
mayor parte de los primeros nueve años de Balaguer en la presidencia del
país experimentaron altas tasas de crecimiento "por
ejemplo, una tasa media de crecimiento del PIB del 9.4 por ciento entre
1.970 y 1.975", mientras que la gente se refería a este suceso como el
"milagro dominicano". El exterior, sobre todo la inversión de
estadounidense, así como la ayuda extranjera, fluían en el país; el azúcar,
para entonces, el producto principal de exportación del país, gozaba de
buenos precios en el mercado internacional y el turismo creció
enormemente. Sin embargo, este excelente desempeño macroeconómico no fue acompañado por
una distribución equitativa de la riqueza. Mientras un grupo de nuevos
millonarios florecía durante las administraciones de Balaguer, los pobres
simplemente se convirtieron en más pobres. Es más, los pobres eran
generalmente el blanco de represión estatal, y sus reivindicaciones
socioeconómicas fueron etiquetadas como "comunistas", y tratados en
consecuencia por el aparato de seguridad del Estado. En las elecciones de mayo de 1.978, Balaguer fue derrotado en su
candidatura para un cuarto periodo consecutivo por Antonio Guzmán, del PRD.
Posteriormente, Balaguer ordenó a las tropas asaltar la Junta Electoral y
destruir las urnas, declarándose el mismo vencedor. El presidente
estadounidense Jimmy Carter y la comunidad internacional se negó a reconocer
la supuesta "victoria" de Balaguer, y, frente a la negación de ayuda
por parte del exterior, Balaguer tuvo que admitir la derrota.
23. Gobiernos Guzmán Blanco y retorno de Balaguer
Antonio Guzmán inauguró su gobierno el 16 de agosto, teniendo el país
la primera transferencia del poder pacífica de un presidente elegido
libremente a otro. A finales de los 1.970, la expansión económica,
aunque en un principio continuó con su determinado ritmo, sin embargo en
cierto momento desaceleró considerablemente a medida que los precios del
azúcar se redujeron y aumentaron los precios del petróleo. Con la
inflación y el desempleo creciendo, esto desencadenó una ola de
emigración masiva desde la República Dominicana hacia Estados Unidos y
Europa.
Las elecciones se celebraron de nuevo en 1.982. Salvador Jorge Blanco,
del Partido Revolucionario Dominicano derrotó a Bosch y el posible
resurgimiento de Balaguer. Jorge Blanco emprendió ciertas reformas
sociales y económicas; sin embargo, al producirse una presión fiscal
financiera internacional sobre el país, se abrió la puerta a una
terrible crisis económica y financiera que puso a la nación en alarmante
punto de inflación. Durante este periodo se produjo una serie de
levantamientos sociales que dio al traste con la popularidad del PRD en
el país y regresando así Balaguer al poder representando al Partido
Reformista en 1.986, donde se mantuvo en el cargo durante los próximos
diez años. Las elecciones de 1.990 estuvieron marcadas por la violencia
y la sospecha de fraude electoral. Las elecciones de 1.994,
también se caracterizaron por una violencia generalizada durante
la campaña, a menudo dirigida a intimidar a los miembros de la
oposición. Balaguer ganó en 1.994, pero la mayoría de los observadores
dedujeron que las elecciones habían sido amañadas. Bajo la presión de
los Estados Unidos, Balaguer acordó celebrar nuevas elecciones en 1.996.
Él mismo no iría.
24. "Pacto patriótico" y ascenso de Leonel Fernández
En 1996, Leonel Fernández Reyna del Partido de la Liberación Dominicana (PLD)
y pupilo de Juan Bosch obtuvo más del 51 % de los votos, a través
de una alianza con Balaguer. La primera gran ejecución de Fernández fue
la venta de algunas empresas de propiedad estatal. Fernández fue
elogiado por poner fin a décadas de aislamiento y mejorar las relaciones
con otros países del Caribe, pero fue criticado por no luchar contra la
corrupción o aliviar la pobreza que afectaba a un 60 % de la
población.
25. Quiebra bancaria y crisis económica (gobierno de Hipolito Mejía)
En mayo de 2.000, Hipólito Mejía del centro-izquierda "PRD" fue
elegido presidente en medio de un descontento popular por los cortes de
energía y la reciente privatización del sector eléctrico. Desde el 1.986
no había sido gobierno este partido. El presidente Fernández, en su
mandato, firmó los Juegos Panamericanos e Hipólito Mejía llevó a cabo
los Juegos Panamericanos en el 2.003, para lo cual tuvo que construir
villas olímpicas, y muchas instalaciones deportivas. A todo lo largo y
ancho del país en cada comunidad se construyó un centro polideportivo,
como un medio para la juventud y salud de la ciudadanía. El presidente
Mejía incentivó la agricultura, y reavivó el campo. En este período hubo
un fraude bancario de la entidad financiera BANINTER, uno de los bancos
principales, que tenía problemas desde años anteriores, como también el
BANCRÉDITO, y el presidente Mejía devolvió a los ahorrantes parte de su
dinero para así evitar una crisis tal como el "corralito" de
Argentina, y evitar que todos los ahorrantes sacaran el dinero de todos
los bancos y se produjera una desestabilidad económica mayor. Su
presidencia vio mayor inflación e inestabilidad del peso. Durante su
tiempo como presidente, la unidad relativamente estable de la moneda
cayó de 16 pesos dominicanos por 1 dólar estadounidense a 60 pesos por
cada dólar estadounidense, dejándolo a 42 pesos por un dólar cuando
salió del poder. En su
gobierno, la República Dominicana participó en la coalición liderada por
Estados Unidos en Irak, como parte de la
"Brigada Hispanoamericana" dirigida por España durante la Guerra de Irak. Pero en 2.004, el país
retiró a sus aproximadamente 300 soldados de Irak. En mayo de 2.004,
Mejía fue derrotado por el ex presidente Leonel Fernández en las
elecciones presidenciales.
26. Segundo mandato de Fernández y ascenso De Danilo Medina
Fernández estableció medidas de austeridad para desinflar el peso y sacar
al país de su crisis económica, y en el primer semestre de 2.006, la
economía creció 11.7 %, llevando el peso a descender hasta 28 pesos por
cada dólar, aunque esta mejoría no duró mucho y el peso se estabilizó en
34 por cada dólar. Su administración se caracterizo por la construcción de
grandes obras y las reformas institucionales, pero también por el aumento
de la inseguridad ciudadana, los casos de narcotráfico, de la corrupción
administrativa y del clientelismo político. En las últimas tres décadas,
las remesas de los dominicanos residentes en el extranjero, principalmente
en los Estados Unidos, se han convertido cada vez más importante para la
economía. De 1.990 al 2.000, la población dominicana de los EE.UU. se
duplicó en tamaño, de 520.121 en 1.990 a 1.041.910, dos tercios de los
cuales nacieron en la República Dominicana. Más de la mitad de todos los
domínico-estadounidenses viven en Nueva York, con una mayor concentración
en el barrio de Washington Heights en el norte de Manhattan. Durante la
última década, la República Dominicana se ha convertido en la principal
fuente de inmigración hacia Nueva York, y hoy el área metropolitana de
Nueva York tiene una mayor población dominicana que cualquier otra ciudad,
con excepción de la propia Santo Domingo. Las comunidades dominicanas
también se han desarrollado en Nueva Jersey
"en particular, Paterson", Miami, Boston, Filadelfia, Providence y
Lawrence, Massachusetts. Además, decenas de miles de dominicanos y sus
descendientes viven en Puerto Rico. Muchos dominicanos llegan a Puerto
Rico ilegalmente por mar a través del Canal de la Mona, algunos para
quedarse y otros para pasar a los EE.UU. "ver Inmigración
dominicana a Puerto Rico". Los dominicanos residentes en el
extranjero enviaron un estimado de 3.000 millones de $ en remesas a sus
familiares en el país, en el año 2.006. En 1.997, una nueva ley que entró
en vigor, permitiendo que los dominicanos residentes en el extranjero
pudieran retener su ciudadanía y ejercer el voto en las elecciones
presidenciales. El presidente Fernández, quien creció en Nueva York, fue
el principal beneficiario de esta ley.Fernández fue sustituido por su
propio compañero de partido Danilo Medina en las elecciones presidenciales
de 2.012; Mejía, quien iba como principal contrincante por el PRD, fue
vencido por Medina en primera vuelta.Medina comenzó su mandato con una
serie de controvertidas reformas económicas y sociales a fin de hacer
frente a la situación fiscal dejada por la administración de Fernández,
que a pesar de una supuesta austeridad implementada por su gobierno, dejó
un gran déficit fiscal durante su último mandato ascendiente a más de
180.000 millones de pesos dominicanos.
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